La ola de violencia en Cali ha escalado con un nuevo acto sicarial que impacta directamente en el crimen de la exjueza de paz Cruz Magnolia Sánchez, ocurrido tan solo 24 horas antes.

El abogado Fredy Albeiro Zapata Rivas fue uno de los dos hombres asesinados la tarde de este viernes en la cafetería Ventolini, ubicada en la avenida sexta norte con calle 28.

Lo revelador es que Zapata Rivas estaba directamente vinculado a la exjueza Sánchez, quien fue atacada a tiros el jueves.

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El vínculo con la exjueza de paz 

La víctima, que portaba un arma de fuego al momento de ser atacada, aparece mencionada en una denuncia por secuestro simple interpuesta por la exjueza Cruz Magnolia Sánchez el pasado 9 de septiembre.

Según la denuncia, Zapata Rivas se reunió con Sánchez en un centro comercial para hablar sobre la propiedad de unos lotes en disputa. La exjueza relató que el abogado, quien dijo representar a un hombre con interés en los terrenos, la presionó para que se retirara del pleito.

Fragmentos de la denuncia de la exjueza Sánchez:

"Me recalcó de nuevo que él quería hablar conmigo para que yo me evitara problemas mayores y que no tuviera que lamentarlo después".

"Me dijo que me retirara del proceso, que no me volviera a aparecer que porque yo utilizaba niños para coger terrenos, que yo estaba amparada por el señor Mayeta y por el señor Palo y eso lo que era es estar trabajando con bandidos y le estaba haciendo mucho daño a la familia (...)".

La exjueza denunció que al salir del encuentro, el abogado Zapata la forzó a subir a una camioneta blanca: "Abró la puerta del vehículo donde me dijo que me subiera que yo ya sabía que me tenía que subir... donde el Doctor Fredy de nuevo me insiste de que me retire del proceso..."

La exjueza Sánchez, quien había fungido como juez de paz por 10 años, fue asesinada en la tarde del jueves 13 de noviembre.

Otros pleitos de Zapata Rivas

Zapata Rivas no era ajeno a las controversias legales. El abogado había entregado declaraciones a El Tiempo el 24 de septiembre pasado sobre un pleito que llevaba por la ocupación ilegal de una mansión en el corregimiento Golondrinas, al norte de Cali. El predio, de 50.000 metros cuadrados, había sido ocupado irregularmente por el empresario Mariano Andrés Betancur Álvarez.

Las autoridades de Cali ahora enfrentan el desafío de investigar dos asesinatos en 24 horas, ambos con vínculos a pleitos por terrenos y propiedades, en una escalada de violencia que ha puesto en el foco el riesgo de las disputas por bienes inmuebles en la ciudad.